Autor: ByAbigail Calderón
Fecha de publicación: 31 octubre 2024
La contaminación plástica se ha convertido en una de las mayores crisis ambientales del planeta. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), cada año se producen más de 400 millones de toneladas de plástico, de las cuales la mitad son de un solo uso. Esto provoca que millones de toneladas de residuos plásticos terminen en océanos, ríos y suelos, afectando gravemente a la biodiversidad y a la salud humana. Si no se toman medidas urgentes, se estima que para 2050 habrá más plásticos que peces en los océanos.
Ante este panorama, la comunidad internacional está trabajando para implementar un tratado global contra la contaminación plástica, el cual será discutido en la quinta sesión del Comité Intergubernamental de Negociaciones sobre Plásticos (INC-5) en noviembre de 2024. Con la proximidad de estas negociaciones, la Coalición Empresarial para un Tratado Global de Plásticos, que agrupa a más de 250 empresas y organizaciones, ha hecho un llamado urgente a los gobiernos. A través de una carta abierta, piden que se establezcan objetivos ambiciosos y vinculantes para combatir eficazmente la contaminación plástica, destacando que las medidas voluntarias no son suficientes.
Entre las peticiones más destacadas, se incluyen la eliminación progresiva de plásticos problemáticos para el reciclaje y el desarrollo de principios de diseño globales que favorezcan la reciclabilidad de los productos. Las empresas también exigen la implementación de marcos de gobernanza que permitan hacer crecer las metas del tratado a medida que se logren avances.
Aunque muchas de estas empresas son responsables de gran parte de la contaminación plástica mundial, su apoyo al tratado refleja un cambio en su enfoque hacia la sostenibilidad. Empresas como Nestlé, Pepsico y Danone, que forman parte del 24% de las compañías que producen el 50% de la contaminación plástica mundial, han reconocido su papel en el problema y abogan por un tratado que impulse un modelo más circular y responsable.
Este tratado tiene el potencial de marcar un cambio significativo en la lucha contra la contaminación plástica, al establecer normas claras y vinculantes para transitar hacia una economía más circular. Sin embargo, el éxito dependerá de que los gobiernos y las empresas se comprometan a implementar cambios profundos y sostenibles para proteger al medio ambiente y garantizar un futuro sin plásticos contaminantes.
Palabras clave: Contaminación Plástica, Tratado Global De Plásticos, Sostenibilidad, Economía Circular, Responsabilidad Empresarial.
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